compras, y algo más

Esa tarde, salí a buscar mi traje. Un saco negro, largo, gótico, con una camisa negra que llevaba con valentía detalles rojos en el cuello y los puños. un pantalón negro ajustado y unas botas bajas con taco mediano completaban mi nueva vestimenta. guantes negros, un pañuelo rojo en el cuello y mi espada en la cintura terminaron de dar forma a mi estilo. crucé la calle y fui a la tienda de pociones para comprar venenos para mis dagas; y pasé por los bares camino de nuevo a mi casa, y la ví, de espaldas, pero ese pelo, esa ropa, eran inconfundibles para mí. quedé un rato mirando por la oscura ventana que nos separaba.

Spoiler:

Bebía su café lentamente, sorbo a sorbo.
Estaba vestida con un corset rojo fuego acordonado en su espalda con algunas llamaradas estampadas y una falda bordó larga hasta sus rodillas rasgada con el propósito de que sus piernas se lucieran. Llevaba sus sandalias de taco alto y como accesorios guantes largos hasta los codos y cadenas doradas, sumado a algunos de sus cinturones con algunos cuchillos.
Suspiró dejando la taza sobre la mesa, había terminado un trabajo como informante pero al cliente la respuesta no le había gustado, no era su culpa, era la verdad. Sea como fuera no le había pagado. Cada vez que alguien no cumplía su parte del trato quemaba algo, su casa, su bolso... algo... Pero cuando había ido a la choza donde vivía se encontró con sus hijos pequeños y no pudo hacer nada. Resignada lo dejó pasar y había vuelto a la ciudad, cansada.
Bostezó tapándose los labios y se dedicó a mirar por la ventana encontrándose con una mirada conocida. Una sonrisa se extendió por su rostro antes de que pudiera proponérselo.
Los recuerdos de una noche de lluvia y una sala de té la invadieron en seguida. Era él, sin duda alguna. Le hizo una seña con una mano para invitarlo a pasar.

Era ella, Doll. *una sonrisa, un sentimiento profundo provocado por un recuerdo, todo lo invadió a la vez* "desde aquella noche en mi palacio no supe de tí. me alegra volverte a encontrar". pasó y se sentó a su lado. "siempre bien vestida eh?" le dijo al admirar su cuerpo. "que te trae por aquí?". en ese momento recordó un detalle: guardaría ella el poema que le había escrito esa noche? "no creo, fue sólo una noche más" pensó para sí mientras buscaba al mozo para pedirle un café.

-Estuve algo ocupada trabajando... Lo siento si te ofendí, no fue mi intención, creí que de alguna forma me encontrarías, el que me busca siempre lo logra...-le sonrió volviendo a tomar su taza tranquila-. Esperaba que me encontraras...-dijo algo más bajo y lo miró a los ojos-Tu no te quedas atrás, por la vestimenta claro...-le guiñó un ojo.

*se puso feliz al recibir la aceptación de su nueva ropa* "gracias", le dijo sonriente. "tú tampoco me buscaste, sabes donde vivo, y sabes que siempre estoy solo" y al decir eso, esbozó una pequeña sonrisa. "querías que te encuentre?". Su café había llegado, y el mozo lo miró extrañado ante la queja de Hes, al parecer no tenían miel para el café.

Rió un poco.
-No estamos en un lugar de la clase a la que estás acostumbrado, Hes... Con suerte esto se puede llamar café... Pero andaba corta de dinero... -suspiró y lo miró por detrás de su taza-. Soy de las que prefieren que las encuentren, no de las que buscan...-sonrió un poco y le acercó la taza en un implícito "Salud" terminándose su contenido.

"mientras sea contigo, no me molesta el lugar" dijo para evitar pensar en el líquido que se llevaba a la boca. "pero ya te encontré, y esta vez espero no te escapes" dijo en tono burlón, pero sin ánimos de ofender. pero si quieres podemos ir a otro lugar, un poco más cómodo. y allí hablar más tranquilos. Tengo pensado emprender un viaje". Al decir eso, notó un brillo en los ojos de Doll, de los cuales no quiso separarse desde que empezó a hablar.

-Sí podemos ir a otro sitio, si quieres, lamento haberte hecho probarlo siquiera...-señaló la taza con una sonrisa jocosa-. No puedo prometerte nada, Hes-apoyó el mentón en una de sus manos enguantadas para observarlo con interés-. No olvido que has propuesto una aventura en su momento ¿Se trata de este viaje acaso? Te escucho

Se levantó y abrió la puerta para que Doll pasara. "estás muy bella hoy" le dijo al oído mientras pasaba. Mientras caminaban por la calle, comenzó a explicarle lo que tenía en mente. "para serte sincero, había pensado irme un par de días, pero no estaba convencido, al verte hoy, recordé la invitación, y si aceptas, podríamos irnos. a donde gustes, no hay problema." los recuerdos de aquella noche volvían lentamente a Hes, y volvía a inspirarse, "desde aquella vez, no pude volver a escribir". le dijo cambiando un segundo de tema, viendo si ella entendía lo que le decía.

La recorrió un leve escalofrío ante el cumplido pero no dijo nada, un leve rubor en sus mejillas la podía delatar.
Camino a su lado con gracia escuchándolo con atención y se sorprendió ante el comentario.
-¿Cómo que no has podido?-lo observó algo apenada-Es una lástima que no hayas escrito más cosas como el poem...-guardó silencio ruborizándose y apartando la vista-Seguramente un viaje podría devolverte la inspiración... -intentó concentrarse, la idea de aún conservar aquella servilleta con su letra le hacía sentir ridícula-Desde que llegué a Odalya no he salido de aquí, me acostumbré a la comodidad... Por eso no se me ocurre ningún destino...

*viendo que volvía a ruborizarse, como aquella vez, aquella noche* "aquí sólo hay tiendas cerradas". "un destino lejano, quiero perderme" le dijo riéndose, tomando confianza. probablemente vuelva a escribir, al menos mi inspiración había vuelto. rió nuevamente para sí, al ver que ella había entendido lo que le había dicho entre líneas. "por el momento, a dónde vamos?" está comenzando a hacer frío.

-Es verdad...-el comentario le bastó para notarlo, tomándose los codos abrazándose a sí misma para evitar sentir la brisa-Hes, tu eres el que quiso cambiar de sitio, elije por mí, please-se acercó un poco más a él con disimulo, en busca de su calor natural-¿Perderte? Siempre me gusta saber dónde estoy pero... no me molestaría perderme contigo...-confesó mirando a la calle para evitar sus ojos.

sintió su cuerpo acercarse, y pasó un brazo por su espalda para acercarla un poco más. "no te preocupes, un par de cuadras y llegaremos a casa" al decir eso largó una pequeña risa, "casa" pensó, hace mucho que vivo sólo, era eso casa? seguro, pero hogar? "está confirmado entonces! un viaje de placer" dijo con gracia mientras disfrutaba su delicada compañia

Lo dejó pasar su brazo con una leve sonrisa.
-Así que me engañaste para que vaya a tu casa ¿eh, Hes?-bromeó un poco sintiendo el calor de su cuerpo, él era un híbrido, nunca se acercaba tanto a uno pero Hesphyn tenía algo diferente para ella-Entonces... ¿A dónde planeas llevarme de viaje?-levantó un poco la vista en búsqueda de sus ojos oscuros.

"no te engañé" rió brevemente, mientras sus ojos volvieron a juntarse. "pensé, quizás te guste, ir a la playa o a la pradera, son lugares tranquilos, y podemos descansar. pero quién sabe, tal vez pase algo interesante" y sonrió nuevamente. Él había extrañado su breve compañía, pero la había encontrado, y lo aprovecharía. siguieron caminando, y pocas cuadras después, el gran portón de su palacio volvió a aparecer frente a ellos. empezó a buscar la llave, y se dió cuenta que ella lo miraba. "pasa algo?" le preguntó extrañado.

-No... sólo... Te estaba admirando un poco ¿No puedo?-sonrió divertida y le dedicó una larga mirada al palacio-Se ve mejor de día y sin lluvia... Es enorme para que vivas tu solo, Hes...-Pensó en voz alta y esperó a que abriese la puerta-La playa suena bien... Allí debe hacer calor ¿verdad?

"sabía que te gustaría" le dijo y sintió una leve satisfacción al pensar algo adecuado. "sí, es grande, pero ya estoy acostumbrado. Igual un poco de compañía nunca viene mal, gracias por venir" y ambos pasaron a su gran sala de estar, donde se sentaron en los sillones. "cuando te gustaría partir?" le preguntó mientras se acomodaba cerca a ella. sin esperar respuesta, le dijo "quieres bebeer algo?"

Sonrió ante el comentario, ella realmete sentiría la ausencia de compañía en un lugar tan grande, sin gente solía sentirse el frío. Se acomodó en el sofá, una pierna cruzada sobre la otra.
-Me encantaría quitarme el sabor de ese "café"-aceptó mirándolo a los ojos-. Y en cuanto a partir, Hes, acabo de terminar un trabajo así que estoy libre... Deberías aprovecharme ahora que me tienes...-le dijo con picardía.

Al escuchar eso, Hes tomó comfianza y se acercó lentamente hasta que no quedara duda de su intención. Antes de que sus labios tocaran los de Doll, se apartó sonriendo, y dijo " sacarte el sabor de la boca? mmm, un whisky estaría bien."

Había cerrado los ojos para recibir un beso que no llegó y los abrió al oír su voz más alejada. Se sonrojó un poco pero sonrió con confianza y pasó un dedo por sus labios coloreados de un rojo furioso lentamente para tentarlo mientras simulaba pensarlo unos segundos.
-El whisky está bien pero yo esperaba algo más dulce primero...

volvió con una botella sin abrir de Whisky y dos vasos. Los apoyó sobre la mesa que tenían frente a ellos, y le susurró, "lo sé" luego, la sostuvo delicadamente desde una mejilla, acariciándole la parte izquierda de su rostro, y la besó, de forma delicada, pero con pasión. Miró el reloj de péndulo que se paraba sobre una de las paredes y notó que se les había escapado el día. Esperemos que no llegue el frío, pero igual podemos soportarlo, y sonriendo volvió a abrazarla dulcemente.

Nadie la había tratado con tanta delicadeza antes y nadie le demostraba cariño de esa forma tan suave. Aquella caricia la dejó embelesada un rato.
-Es imposible sentir frío contigo cerca, Hes...-admitió inclinándose sobre la mesa para tomar su vaso y esperar a que le sirviera pensando que no era momento de declarar su gran tolerancia al alcohol, prefirió esperar para ver cuál era la de él.

mientras le servía, le confesó "no suelo tomar, creo que daré solo un sorbo" tomó su vaso, y lo levanto para brindar, y le dijo mirandola a los ojos, pero nunca sin perder esa sensacion de cariño que no podía ni quería ocultar "y brindamos por?"

-Brindamos por un reencuentro único y... Por pasar un buen tiempo juntos...-añadió con una sonrisa juguetona e hizo chocar su vaso con el de él y se lo llevó a los labios sin dejar de sostener su mirada. Luego de un largo sorbo bajó el vaso sosteniéndolo sobre sus piernas cruzadas-. Quizás yo soy de las que toman demasiado seguido... No te preocupes por eso, no pretendo verte ebrio, Hes... -rió un poco, relajada y cómoda como estaba.

al escuchar eso, su emoción aumento de forma extraordinaria. ya no se sentía solo. "igual disfrutaremos de esta bebida, le dijo sonriente" solo esperaba que no le haga efecto. o arruinar el momento. Estuvieron un muy buen rato juntos, cada uno disfrutando del calor y felicidad del otro